Nacimiento: muchas togas y un biberón
Pocas cosas dan en el mudo tanta alegría como el nacimiento de una criatura. Sea cual sea el entorno, el ambiente, o las circunstancias, la llegada al mundo de un nuevo habitante nos devuelve la ilusión y la fe en la vida, aunque sea por un momento. Cualquiera que haya sido madre, padre, tío, sobrina, hermano, abuela o cualquier otra cosa, sabrá que esas manitas que tienden los dedos al mundo enternecen hasta al más huraño. Y no es para menos.
Y en el mundo del espectáculo, cómo no, hay muchas obras dedicadas a ello, como protagonistas absolutos de ese Milagro de la Vida, que se plantean desde Qué esperar cuando se esta esperando durante Nueve meses hasta Mira quién habla, que cuentan que La cigüeña dijo sí o las andanzas de un Bebé a bordo, Arizona Baby o las cuitas de Tres solteros y…
Ver la entrada original 715 palabras más